Piensa en la comida en México y es probable que te vengan a la mente los tacos, las tortas y los tamales. Pero ¿y la sopa (o sopas)?
Las sopas, los caldos y los guisos pueden no ser los platillos más glamurosos, pero México tiene muchas variedades regionales deliciosas que deberías conocer. Aquí están las mejores sopas mexicanas para probar.
Pancita
Comencemos con el menudo, mejor conocido como pancita. Lo adivinaste, el menudo está hecho con callos bañados en un caldo rico y sabroso.
La mayoría de los fanáticos del menudo amontonan la cebolla, el cilantro y el jugo de limón antes de comer, y mientras algunos lo aclaman como el rey de las curas para la resaca (se vende por litros los domingos por la mañana por alguna razón), otros lo guardan para eventos especiales.
Birria
Un platillo regional básico del estado de Jalisco, la birria es más un guiso que una sopa, pero es tan deliciosa que no podíamos dejar de incluirla.
Al igual que la pancita, es un favorito para ocasiones especiales, como bodas y cumpleaños, y también se disfruta regularmente los domingos por la mañana.
Está hecho con carne tierna de cabra (o carnero o res) que se cae del tenedor cuando intentas engullirla, combinada con una salsa de adobo picante, y se debe servir con tortillas de maíz calientes, cebolla y limón.
No olvides tener en la mesa listo tu guacamole, cebollas y más.
Sopa azteca
La sopa de tortilla de la Ciudad de México, también conocida como sopa azteca o incluso sopa tarasca, hace lo que dice en la lata, combinando tiras de tortilla de maíz crujientes con una base de tomate picante de rico sabor.
Trozos de aguacate, cubos de queso fresco y cucharadas de crema se apilan tradicionalmente encima, aunque algunas personas también les gusta agregar chicharrón (chicharrón) y chiles pasilla.
Independientemente de los extras que decidas incluir, es probable que esta sopa se convierta en una de tus favoritas.
Sopa de lima
Algunos dicen que la sopa de lima, que proviene de la península de Yucatán y es una combinación de técnicas e ingredientes de cocina maya y española, es similar a la sopa de tortilla. No obstante, más allá del uso de tiras de tortilla, no vemos el parecido.
Después de todo, la sopa de lima se basa en gran medida en el sabor casi ácido que la lima aporta a este plato fresco pero contundente, que también suele incluir pollo, pimiento, tomate y cilantro.
Sopa de piedra
Si hablas español, es posible que te confundas con el nombre de la próxima sopa: sopa de piedra. Si no hablas español, vale la pena señalar que esto se traduce como “sopa de piedra”.
Un platillo completamente indígena, del pueblo de San Felipe Usila en Oaxaca, la sopa de piedra es una sopa simple e intrigante que, sorprendentemente, involucra el uso de una piedra.
Una vez que se preparan los ingredientes (principalmente vegetales y mariscos), se retiran las piedras precalentadas de las llamas y se agregan a la olla, esencialmente cocinando el caldo de adentro hacia afuera.
Sopa de fideos
La sopa de fideos no es exactamente específica de México (de hecho, también es un alimento básico en la cocina regional filipina, española y Tex-Mex).
Sin embargo, es un caldo simple de consumo común, que a menudo se sirve como plato de entrada para comidas de fonda (una fonda es un restaurante en una casa familiar) y comida corrida (comidas preparadas a precios asequibles).
Los fideos tienden a romperse y dorarse antes de agregarlos a la base de caldo. Para darle un toque más caprichoso a la sopita de fideos, algunas personas usan letras de pasta, creando sopa de letras.
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Caldo de siete mares
La ‘sopa de siete mares’ mexicana usa mariscos como ingrediente principal, curiosamente, y también se conoce en español como caldo de siete mares y caldo de mariscos (la menos palabra ‘sopa de mariscos’).
Generalmente popular en las áreas costeras de México, como la península de Baja California y Puerto Vallarta, tiene una apariencia acuosa pero un rico sabor, y por lo general combinará cualquier marisco de temporada con una base de pollo, tomate o pescado.
Pozole
Posiblemente la más conocida de todas las sopas mexicanas, el pozole (del náhuatl pozolli) es un platillo tradicional que requiere mucho tiempo y que generalmente se guarda para ocasiones especiales, incluido el Día de la Independencia de México.
Aunque hay variaciones regionales del pozole, incluidas las versiones verde, blanca y roja, el pozole estándar (que debes probar en México) contiene maíz y cerdo (por lo general), a los que la mayoría agregarán cebolla fresca, cilantro, col, rábano en rodajas y una pizca de jugo de lima. Se come acompañado de tostadas untadas con crema.
